Cuando el salary man Jun llega a casa, encuentra a su mujer sangrando por la boca y tirada en el suelo. La escena le sorprende, pero resulta que la sangre es sólo ketchup y que ella finge estar muerta. Sin decirle por qué, finge estar muerta todos los días. Jun se queda estupefacto ante el comportamiento de su mujer, pero empieza a sentirse incómodo con ella.